Estaba Uma, de soltera, aburrida, fuera aún de las garras de su cruel marido aquel todo poderoso, y ya se sabe que el aburrimiento en lo Dioses suele tener magnificas consecuencias.
Uma quiso ser escritora y puso mucho empeño en ello, el tiempo para los dioses no tiene sentido , este y el espacio es una masa amorfa en la que los mortales se retuercen, ellos están por encima de todo eso.
Cuando la Diosa tomó la pluma de ave y el pergamino de hoja, la misma hoja sagrada donde se detallan los mantras, dispuesta a contar bellas historias o poemas divinos, tuvo conciencia de su persona y retorno mortal.
Fue una sensación curiosa que solo se daba cuando escribía , al dejar de hacerlo la diosa que era de nuevo se imbuía del poder relegado durante esta maniobra creativa. El sentirse mortal le pareció como una suerte de droga de opio mágico que la instaba a repetir , con perversos efectos secundarios que la llenaban de tristeza y melancolía pues durante ese tiempo la muerte la rondaba , era mortal y sabedora de las limitaciones humanas , sentía la soledad como nunca y leyendo textos mortales entendía a los mismos ; se sentía mujer con cántaro en la cabeza de la casta mas inferior , pasaba hambre y frió y el Himalaya ya no era el paraíso nevado si no un desierto helado , solitario y avasallador . Estas circunstancias acrecentaban su creatividad y muchos relatos legendarios salieron de su divina cabeza .
Fue en aquellos tiempos cuando Shiva la cortejó y la enamoró y mas tarde su hijo vendría al mundo , aquel con el rostro de elefante santo , y ya Uma , después de duras pruebas encomendadas por su severo novio , se encarnó con el nombre de casada de Parvati y de forma gradual sus obligaciones como parte de la organizadora del cosmos , inseparable de Shiva , siendo los dos uno solo , le hizo abandonar su afición de escritora y de nuevo las barreras entre mortales y dioses que por unos instantes se abolieron en su sagrada cabeza , se elevaron hasta alturas inconmensurables y ya nada entendió de los mismos tan solo lo mas superficial de estos pues el cosmos es muy inmenso , grande como la nada y los humanos solo somos pequeños entes , pequeñísimos en el conglomerado galáctico y universal y sus nuevas tareas incluían a todos los hijos del universo no solo al mono desnudo.
Intentó retomar su antigua afición más la ironía no la entendía por ser un concepto demasiado humano, la ambigüedad tampoco por ser ella el sumún de lo ambiguo, el sarcasmo se le escapaba de las manos y la retórica estaba en las asistencias de otros dioses, aquellos de la otra parte del mundo en Crecía. No pudo nunca más escribir algo que a los ojos de los mortales no fuera advertencia, mandato o código divino indescifrable.
Cuentan , que cuando Parvati descansa , en la apacible siesta entre los juncos , Morfeo , aquel extraño mediterráneo en tierras nevadas , consigue que Uma regrese por unos instantes y de rodillas junto al lecho de cañas de la diosa , el joven alado bate sus alas suavemente y maravillado escucha de la boca sonámbula de Parvati las mas bellas historias épicas que mortal pudiera llegar a glosar .
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